Contrato Formativo

Comenzamos este segundo post con un “indagando” sobre el Contrato Formativo pero… ¿Qué es un Contrato Formativo?

Un Contrato Formativo es un contrato, que tiene como objetivo ofrecer una formación teórica y práctica durante la cual los jóvenes aprenden el desempeño de un oficio o puesto de trabajo.

Si hacemos un símil, entre un contrato formativo de trabajo, con mi matriculación en la carrera de Educación Infantil, en la UAM, se puede decir, que, estar estudiando esta profesión, y estar cursando esta asignatura (TIC) es una elección propia que he tomado libremente, por lo que asisto a las clases con interés y ganas de aprender. Por eso, nuestro profesor Joaquín Paredes, nos ha propuesto una actividad curiosa e interesante, que nos ha hecho pensar…

Como alumna, debo comprometerme a cumplir unas pautas para tener una buena actitud frente a la asignatura, con mis compañeros y profesor y conmigo misma.

Nos ha propuesto un contrato formativo entre la asignatura y el alumno, entre compañeros y con el maestro. Este contrato tenía que ser producto de nosotros mismos, y con una lluvia de ideas, cada uno, ha ido aportando propósitos que debemos cumplir durante el curso.

Poco a poco, hemos ido extrayendo todos los componentes intrínsecos que forman parte de un Contrato Formativo, y hemos creado nuestro propio Contrato Formativo de TIC.   

Contrato Formativo:

-          Tener una actitud abierta para aprender.

-          Socializarnos con los compañeros.

-          Generar buen ambiente, respetando la libertad de expresión.

-          Escucharnos unos a otros y respetar los turnos de palabra y las opiniones ajenas.

-          Ganar experiencias.

-          Tener ganas de hacer, participar, dar el máximo de mí.

-          Ayudar a los demás.

-          Ser puntuales y asistir siempre a clase.

-          Trae el material necesario para la asignatura.

Yo, Sandra Sanz Sánchez, estoy de acuerdo con este contrato formativo que firmo con mi compañera Patricia Asenjo. 

En el ámbito de la Educación Infantil, también son necesarios los Contratos Formativos y de Aprendizaje. 

Como experiencia personal, cuando estaba cursando el Ciclo formativo de Educación Infantil, tuve la gran suerte de estar tres meses de prácticas. Tres meses donde realmente aprendí que es ser maestra.

La teoría es muy importante, es fundamental, ya que son los cimientos de tu profesión, pero la práctica es algo básico y esencial para formarte como profesional. Los contratos formativos te permiten aprender mediante la práctica, aprender a través de las experiencias, del día a día.

Por eso, a la pregunta de ¿Cuál es la importancia de un Contrato Formativo en Educación infantil? mi respuesta es clara y contundente:

Para formar docentes y maestros, un Contrato Formativo es imprescindible. Poder combinar la teoría con la práctica es lo ideal, porque a través de experiencias, de poder hacer, de vivir situaciones reales, es cuando realmente aprendes.

"Enséñame y lo recuerdo, involúcrame y lo aprendo."